Hoy se ha reunido la corte para conocer a otros personajes de la Edad media ¿sabéis quién? Bufones,Juglares y Trovadores ¿los vemos?
La reina de la corte se lo pasó tan bien que decidió celebrarlo con un banquete. donde cada uno celebró la fiesta a su manera.
Transmisores de historias y fuente de entretenimiento en las grandes cortes. Bufones y juglares son dos de las figuras más conocidas en la historia del mundo de la escena. Eso sí, cada uno por motivos diferentes.
BUFONES
El bufón o gracioso se hizo famoso con sus palabras y acciones que convidaban a la risa segura. Sobre todo, ejercían su oficio ante los poderosos, ante las grandes cortes. Su obligación principal era hacerlos reír y asegurar las carcajadas. Su nombre, según algunos historiadores, proviene del bufido que emitían tras soltar alguna de sus gracias.
Los bufones fueron haciéndose con más presencia en las cortes. Cada castillo tenía el suyo. Llegaron a adquirir verdadera importancia. Incluso, los historiadores señalan que en Alemania tomaron parte en conspiraciones, en guerras, o fiestas. Algunos de ellos llegaron a ser nombrados caballeros. Kurtz van den Rosen es un ejemplo de esto último. Hay más. Algunos bufones adquirieron títulos de nobleza y bastantes cualidades de hidalgos.
JUGLARES Y TROVADORES
Similares y distintos a la vez. El juglar era un artista. Una persona con multitud de habilidades, pero con un fin claro: entretener a la Europa del medievo. Entre sus funciones estaba la de contar historias. Eso sí, con una clara diferencia con los trovadores, pues los juglares tenían orígenes más humildes.
Los juglares fueron personas dedicadas en principio a cantar historias mitad verídicas, mitad leyendas en forma de poemas, extensos. El oficio era considerado de muy bajo nivel, por lo que vagaban de reino en reino cantando en un lado lo que pasaba en otro, algunas veces sus compañías producían auténticos espectáculos de danza y música, actuaban preferentemente en tabernas aunque algunos más colmilludos conseguían actuar en cortes, fiestas o ferias. Su paga era dinero, o en especie, vino adelgazado con agua. Luego se distinguieron de los trovadores, porque estos generalmente pertenecían a la nobleza, se dedicaban a componer nueva música y no ejecutaban sus composiciones, pues consideraban eso un trabajo propio para un perico o un juglar. Los bufones eran personajes de la vida cortesana, es decir, tenían una plaza bien definida en una corte, su labor era la de divertir al soberano, quien era su patrón. Rara vez los bufones salían de su medio natural al contrario de los juglares, además, los bufones eran expertos en el arte de la acrobacia, los malabares, contar chistes e improvisar rutinas cómicas, algunos llegaban a realizar trucos de magia para variar un poco sus actuaciones.Otra de las diferencias era que los trovadores eran los artífices de sus propios versos, mientras que los juglares se dedicaban a parafrasearlos en el mejor de los casos. Con todo, hay que agradecerles que se convirtieran en transmisores de la época de medieval.
Nuestro Juglar Manuel parece que no tuvo mucho éxito en la corte con su flauta, pero descubrió que sus melodías tenían un público muy especial ¿sabéis cual? Los ratones.
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SYMBALOO CASTILLOS
